PUEDEN SACAR CHISPAS BRONCO, MAURICIO Y ADRIÁN
Existe un común denominador entre los tres políticos que ganaron la Gubernatura y las Alcaldías de San Pedro y Monterrey. Son de ‘mecha corta’ y ven el tema de seguridad de una manera muy particular.
Jaime Rodríguez, gobernador electo de Nuevo León y Mauricio Fernández, alcalde electo de San Pedro, reaccionan intempestivamente ante las críticas a sus métodos para el tema de la seguridad.
Y otro ingrediente, es la información privilegiada y el control que aún ostenta sobre la Agencia Estatal de Investigaciones el alcalde electo de Monterrey, Adrián de la Garza.
Los tres tendrán que coordinarse en el tema de seguridad, relación que por sus antecedentes puede ser explosiva.
Por un lado, Mauricio Fernández ya dio muestras durante su gestión como alcalde, entre 2009 y 2012, de que hasta reta a golpes a las autoridades estatales cuando éstas se involucran en el tema de seguridad en San Pedro Garza García.
Incluso, retó a golpes a quien ahora será su homólogo en la capital regia, al exprocurador Adrián de la Garza, cuando policías ministeriales de la Agencia Estatal de Investigaciones detuvieron a uniformados municipales de San Pedro y los acusaron de proteger a gente de Los Beltrán Leyva en el robo de vehículos.
Y en la otra esquina, el gobernador electo, Jaime Rodríguez, tras recibir un segundo atentado contra su vida cuando fue alcalde de García, también entre 2009 y 2012, dijo en aquella ocasión que a él lo intentaban matar porque “no se hacía pendejo, como otros alcaldes”.
Además hay que recordar que cuando “El Bronco” estaba en campaña en el pasado mes de abril, Mauricio declaró públicamente que no votaran por Jaime, que éste era un peligro para Nuevo León y que lo de los atentados contra su vida fueron “puro cuento”.
Pues ambos tendrán que sentarse en el Consejo de Seguridad de Nuevo León, para discutir los temas del combate al crimen organizado y de la cooperación y el intercambio de información entre el C-4 de San Pedro y el C-5 del Estado.
Y a estas personalidades extravagantes se suma Adrián de la Garza, que por más que busque dar la impresión de ser un político, la verdad es que es un policía, eso es todo lo que ha hecho en su carrera.
Y como tal, está acostumbrado a un trabajo con decisiones verticales donde precisamente era él quien daba las órdenes en la Procuraduría.
Además que precisamente por su trabajo como procurador, está muy bien enterado de lo que realmente sucedía en San Pedro con Mauricio Fernández y en García con Jaime Rodríguez, en los años más aciagos de la inseguridad en el área metropolitana de Monterrey.
La información que tiene Adrián de la Garza sobre la seguridad municipal en San Pedro, puede ser muy comprometedora para Mauricio Fernández, que cuando fue alcalde hasta tuvo que declarar en la PGR sobre sus informantes y el tema de la seguridad en su municipio.
Así también, el control que aún ejerce Adrián de la Garza en la Agencia Estatal de Investigaciones, que gracias a él dirige Guadalupe Saldaña, es un asunto que el gobernador electo, Jaime Rodríguez, tendrá que atender.
Porque ahora Jaime, y a quien nombre como su procurador, deberán recobrar el control de esa corporación, que además tiene un círculo muy cerrado que necesitan abrir, revisar y sanear.
Jaime, Mauricio y Adrián son tres personalidades que deberán sentarse a intercambiar información y a trabajar en conjunto.
¿Podrán hacerlo sin ocultarse informes, o sin confrontarse por la aplicación de políticas de seguridad?